El dolor abdominal es una de las causas más frecuentes de consulta médica y puede deberse a múltiples condiciones, desde cuadros leves y transitorios hasta enfermedades que requieren evaluación quirúrgica urgente.
Dependiendo de su localización, intensidad, duración y síntomas asociados, el dolor abdominal puede ser indicativo de condiciones como:
Apendicitis aguda
Colecistitis (inflamación de la vesícula biliar)
Hernias complicadas
Diverticulitis
Obstrucción intestinal
Perforaciones viscerales
Entre otros procesos inflamatorios o infecciosos que pueden comprometer órganos intraabdominales.
También existen causas no quirúrgicas, como infecciones gastrointestinales, alteraciones digestivas funcionales o enfermedades ginecológicas y urinarias.
Es intenso o progresivo
Se localiza en un área específica (como la fosa iliaca derecha o el epigastrio)
Se acompaña de fiebre, náuseas, vómitos, distensión abdominal o cambios en el tránsito intestinal
Aparece en el contexto de traumatismo abdominal
Persiste por más de 6 a 12 horas sin mejoría
El cirujano general está capacitado para diagnosticar con precisión el origen del dolor y determinar si se requiere tratamiento médico, vigilancia o intervención quirúrgica. En muchos casos, una evaluación temprana puede evitar complicaciones mayores y mejorar significativamente el pronóstico del paciente.